Llevar un control del peso y visitar frecuentemente la báscula....

Subirse a la báscula recién levantados o pesarse todos los días es una costumbre adquirida por mucha gente pero:

¿Es realmente un buen hábito?

Para responder a la primera pregunta, la respuesta es rotundamente no, no es algo que deberíamos hacer todos los días por diferentes motivos:

1. La información que nos dan la mayoría de las básculas que tenemos en casa es solamente un número y con únicamente ese número, no podemos predecir en qué situación nos encontramos: normalidad, sobrepeso, obesidad, etc., ya que para hacerlo necesitamos muchos más datos.
2. Es posible que cada día que nos subamos a la báscula, pesemos una cosa diferente por muchos motivos: tenemos más o menos retención de líquidos, tenemos el vientre o la vejiga llena, etc.
3. Es bastante frecuente pensar que si hoy peso más que ayer es porque he comido algo que no me sienta bien y que me ha hecho "engordar". Esto es un mito y no tiene nada que ver con la realidad ya que de un día para otro no se puede saber si tenemos más grasa que es realmente el dato que nos importa para saber en qué situación nos encontramos.

¿La báscula nos da información verdadera?

Para responder a esta segunda pregunta, también debemos decir que no, ya que como hemos dicho anteriormente las básculas convencionales simplemente nos dan un número que no nos dice absolutamente nada.

El mayor ejemplo para demostrarlo es que una persona muy deportista que tenga mucha masa muscular y un porcentaje muy bajito de grasa, en la báscula puede dar lugar a un peso muy elevado que si lo llevamos a la ecuación que suele utilizar todo el mundo para saber cuál es su IMC (Índice de Masa Muscular), puede dar lugar a sobrepeso u obesidad, cuando realmente todos sabemos que una persona deportista con poca grasa y mucha masa muscular no está obeso.

IMC= (Peso en kg)/ (Talla en metros)2

CONCLUSIÓN

De este artículo sacamos tres conclusiones principales y que todos deberíamos conocer para no tener información equivocada:

1. No debemos pesarnos todos los días ya que en un día no le hemos dado tiempo al cuerpo a metabolizar la grasa y por lo tanto no podemos saber si ha aumentado o no.
2. El único dato que debe importarnos para saber en qué situación nos encontramos de normopeso, sobrepeso, obesidad, etc. es el porcentaje de grasa y no el número de la báscula.
3. La ecuación del IMC y la tabla que hace referencia a ella está obsoleta y no debería utilizarse para saber en que situación nos encontramos.

Por el contrario, debemos o bien acudir a la consulta de un nutricionista para que nos haga una medición por bioimpedancia que nos diga exactamente cuál es nuestra composición corporal (porcentaje de grasa corporal, musculo, agua...)